“La educación es el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo. La educación es el gran motor del desarrollo personal. Es a través de la educación que la hija de un campesino puede llegar a ser médico, que el hijo de un minero puede llegar a ser cabeza de la mina, que el descendiente de unos labriegos puede llegar a ser el presidente de una gran nación. No es lo que nos viene dado, sino la capacidad de valorar lo mejor que tenemos lo que distingue a una persona de otra”. Esta frase de Nelson Mandela sintetiza la razón por la cual Angelo Calcaterra se sumó en su momento al programa de “Desarrollo Humano a través del deporte”, que realizan la Fundación Botines Solidarios y Fundación DAD. Calcaterra considera que existe una relación positiva entre el desarrollo humano y la práctica de actividades físicas. El ejercicio mejora la salud, los procesos cognitivos, la sociabilidad, la productividad y la calidad de vida en general.
Pero, además, poniendo en contexto la situación de vulnerabilidad de las personas con las que contribuyó, el CEO de San Tonino tiene la certeza de que el impacto es mucho mayor: para ellos, sobre todo, se trata de contribuir con su formación, para ello, considera que es vital para “Transformar su realidad y la del entorno, a través de la cultura del deporte, en este caso, para que puedan realmente elegir su futuro. Les dimos un espacio y visibilizamos la problemática, aportando soluciones, al darles un espacio de desarrollo comunitario a través de aquello que creían que era entretenimiento, pero que, finalmente, fueron vigas para construir un porvenir mejor”, culmina el CEO de San Tonino.