La igualdad de posibilidades en relación con una postulación en el ámbito laboral sigue siendo algo a mejorar en pos del desarrollo humano, el cual es un principio fundamental.
A lo largo de su amplia trayectoria en el empresariado argentino, Angelo Clacaterra reconocido arquitecto y CEO de San Tonino , mantuvo con convicción una filosofía de contratación de personal que hoy lo enorgullece, por lo que lo invitamos a compartirla.
En principio, el arquitecto destaca aquello que la UE define como inclusión social, un “proceso que asegura que aquellas personas que están en riesgo de pobreza y exclusión social tengan las oportunidades y recursos necesarios para participar completamente en la vida económica, social y cultural disfrutando un nivel de vida y bienestar que se considere normal en la sociedad en la que ellos viven”.
“Es, entonces, en la capacidad de quienes reclutan gente para diversos puestos donde se encuentra la necesidad de asegurar que todas las personas que aspiren a ese puesto cuenten con una mirada que los iguale, priorizando su idoneidad para aquello a lo que se están postulando, porque las fronteras de la exclusión son amplias, debemos hacer el movimiento inverso: ensanchar la visión y la mentalidad hacia un horizonte diverso, pero rico”, señala el experto.
Allá donde menos lo esperamos puede haber una persona con gran potencial. Como pasa con las ideas que no dejamos crecer y cortamos de cuajo, igualmente sucede para con las personas de las que “no tenemos que dejar que intervengan prejuicios propios o culturales, sociales o económicos, de etnia o físicos, para hacer de esta una sociedad más abierta y justa”, concluye.