Conocemos el término Fintech: es la unión de las palabras en inglés finance (finanzas) y technology (tecnología). Esto se traduce en que empresas de origen digital, cuya actividad principal es otorgar servicios financieros, lo hacen mediante el uso de la tecnología.
Los dispositivos móviles están alcance de casi todos, cuentan con tecnología moderna y que puede identificarnos de forma segura; permiten transferir valor, y que todos los servicios financieros, bancos, compañías de seguro, etcétera, estén en nuestras manos y esto representa una oportunidad muy grande de acceso al sistema financiero, como mencionaba antes el arquitecto Angelo Calcaterra, CEO de San Tonino.
Esta posibilidad de ser parte del ecosistema que rige la actualidad tiene que ver también con la creciente penetración de celulares e internet en el mundo y, particularmente en la Argentina, es un diferencial para muchos emprendedores que, a partir de esta posibilidad, es decir, del desarrollo tecnológico y de la aparición y crecimiento de nuevas formas de provisión de servicios financieros, pueden dar visibilidad a sus proyectos.
Así, al promoverse la competencia en el sector financiero, se derivará en menores costos. Además, hay una cuestión de funcionalidad, porque, con un dispositivo y conectividad, podes tener un trabajo en el mundo digital y esto es una gran oportunidad y un crecimiento para la economía argentina.
A todo ello se le añade que, la mayoría ya no está dispuesta a hacer filas de espera, así como también son muchos los que confían en las aplicaciones móviles para manejar su dinero y hay amplio acuerdo en considerar que el acceso al dinero dejará de existir tal cual lo conocemos, en los próximos años. La telefonía móvil en nuestro país es un canal más que atractivo para promover servicios financieros.
“Por eso, es un momento propicio para evaluar sus ventajas y no demonizar per sé los avances tecnológicos, que pueden ser funcionales y abrir muchas puertas”, confirma el CEO en San Tonino.