Angelo Calcaterra, arquitecto de amplia trayectoria y CEO de San Tonino S.A., aporta, en este artículo una interesante visión sobre la arquitectura moderna. En este artículo, haremos un recorrido panorámico por emblemas de la arquitectura moderna en el mundo.
Muchas de las edificaciones del movimiento arquitectónico moderno fueron emblemáticas, sintetizando conceptos y materializando diseños innovadores que congregaron tanto arte como sentido y funcionalidad en un nuevo y equilibrado nivel en una nueva forma de habitar los espacios.
Para comenzar el recorrido, veremos algunas características de La Torre Eiffel es considerada una de las edificaciones precursoras de la arquitectura moderna. Esta estructura de hierro tratado, construida por Gustave Eiffel, fue la construcción más alta del mundo durante más de cuarenta años. Distintos autores resaltaron su valor simbólico tanto para la modernidad como para las vanguardias, además de ser atrayente y de ser un paseo obligado para tantos turistas que visitan París.
Pabellón de Cristal (1914)
Esta obra de Bruno Taut, constituida por una estructura metálica con cúpula de cristal, fue la joya de la Exposición de la Deutscher Werkbund de 1914, año en que fue inaugurada. Si bien el edificio fue demolido poco después de culminada la exposición, su gran influencia resultó significativa. Hoy podemos reconocer su genética, por ejemplo, en obras como la Pirámide del Louvre de Ieoh Ming Pei.
Banco de Ahorros de Viena (1906)
La obra de Wagner posicionó a la capital austríaca en el podio tripartito de las ciudades que mejor potenciaron la materialización, uno de los conceptos centrales de la arquitectura moderna, fundando la denominada “funcionalidad de la arquitectura”.
Edificio Seagram (1958)
Desprovisto de ornamentos, este rascacielos concentra una cantidad de criterios que definen la arquitectura moderna, llevando la función, el minimalismo y el estilo internacional hacia nuevos horizontes.